Les fleurs de Virgile
En conformidad con el uso de la época y el estatuto del poeta antiguo, las grandes obras de Virgilio responden a encargos de protectores que deseaban honrar el pastoreo (Bucólicas), la vida rural (Geórgicas) o a los héroes (Eneida). Poeta observador, Virgilio se alejó sin embargo de las reglas impuestas para cantar su admiración por las "flores de oro", los lirios silvestres o incluso las flores libadas por las abejas, que despertaban su especial interés. Tanto por el texto como por las ilustraciones, Les Fleurs de Virgile da escrupulosa cuenta de las plantas cantadas por Virgilio, sin olvidar los problemas de identificación. Tras Les plantes dans la Bible, Solange y Jean Maillat ofrecen de nuevo al lector una obra rica y precisa, cuyas citas y abundantes fotos arrojan una nueva luz sobre los textos virgilianos.
The major works of Virgil conform to the usage of the period and the statutes of ancient poetry, answering to patron's orders who wished to celebrate pastures (the bucolic), rural life (the Georgics), or heroes (the Enid).
Although an observing poet, Virgil nonetheless distanced himself from imposed constraints to tell of his admiration for "golden flowers," wild lilies or even flowers pollinated by bees, of which he was particularly interested.
The text as well as the illustrations of The Flowers of Virgil, scrupulously portray the plants sung by Virgil, and even include hints for identifying such plants and flowers.
After The Plants of the Bible, Solange and Jean Maillat give us a new work to read, both rich and precise, the citations and numerous photos of which shine new light on the texts of Virgil.
En conformidad con el uso de la época y el estatuto del poeta antiguo, las grandes obras de Virgilio responden a encargos de protectores que deseaban honrar el pastoreo (Bucólicas), la vida rural (Geórgicas) o a los héroes (Eneida). Poeta observador, Virgilio se alejó sin embargo de las reglas impuestas para cantar su admiración por las "flores de oro", los lirios silvestres o incluso las flores libadas por las abejas, que despertaban su especial interés. Tanto por el texto como por las ilustraciones, Les Fleurs de Virgile da escrupulosa cuenta de las plantas cantadas por Virgilio, sin olvidar los problemas de identificación. Tras Les plantes dans la Bible, Solange y Jean Maillat ofrecen de nuevo al lector una obra rica y precisa, cuyas citas y abundantes fotos arrojan una nueva luz sobre los textos virgilianos.
